Nuestra motivación fundamental fue y sigue siendo el deseo de innovar, de transformar la realidad escolar, de recrearla construyendo una identidad institucional propia. Una cultura que fomente la audacia, la heterogeneidad, la solidaridad y el respeto permitiendo integrar ideas, ambientes y proyectos, fomentando el trabajo en equipo pero también la tenacidad, la voluntad y la perseverancia. Una actitud individual y colectiva dispuesta a cuestionar las convencionalidades impulsando un modelo diario donde no exista la estabilidad, sino el dinamismo constante de la exploración. Cada momento y cada espacio debe ser un instante educativo único.